Desde mi infancia, siempre he tenido una gran admiración por la persona histórica de Jesús. Yo había visto todas sus películas. Pensé muy bien de Él.
El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. Juan 10:10
Como un niño, en mi casa estaba curioso. Quería pintar la Biblia familiar y ver las imágenes de Jesús. También me atraían las imágenes de Jesús colgado en la pared. Muchas veces pensé, "Ojalá pudiera haber conocido a ese hombre, Jesús."
Lo único que no me gustaba de la vida de Jesús fue como terminó Su historia. Pensé que debería haber sido re-escrita con un final feliz, la parte acerca de el ser crucificado. Me parecía un gran despliegue, la curación de personas y el enseñar a la gente me gustaba. Pero entonces porque todo llegó a su fin. ¿Por qué tienen que ponerlo sobre una cruz y matarlo?
No fue hasta después que me di cuenta de que la crucifixión de Jesús fue en realidad la razón principal por la que Él vino a la tierra en primer lugar.
Jesús vino a morir. Él habló de ello con frecuencia y en gran detalle. Su detención y crucifixión no le sorprendió. Jesús lo resumió bien cuando dijo a sus discípulos, “el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos". (Marcos 10:45).
Si te bendigo, bendicenos con tu comentario.
domingo, 14 de marzo de 2010
sábado, 6 de febrero de 2010
Dionny Baez Palabra Del Dia - Dia 17
Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. Juan 1 :14
He oído la historia de un niño; que una noche durante una gran tormenta tenía miedo. Aterrorizado, dio gritos desde su habitación, "Papá, estoy asustado!"
Su padre no quería levantarse de la cama, lo llamó de nuevo, y su padre respondió, "No te preocupes, hijo. Dios te ama y te cuidará".
Hubo un momento de silencio. El niño dice, "Sé que Dios me ama, pero ahora mismo, necesito a alguien que tenga piel."
A veces, nuestro gran Dios parece increíble, y casi intocable. Ahí es donde Jesús viene, fue Dios con piel, caminando entre nosotros y nos mostró lo que es ser como Dios. Creo que C.S Lewis lo dice muy bien así: "El Hijo de Dios se convirtió en un hombre para que los hombres pudieran ser hijos de Dios".
El hijo de Dios se hizo hombre para que puedas convertirte en hijo de Dios. Tu no haz nacido como hijo de Dios. La Biblia dice que es necesario nacer de nuevo (véase Juan 3:3). Tiene que venir un momento en tu vida en el cual te arrepientas de tus pecados e invitar a Jesucristo a entrar en tu vida para ser tu Salvador y Señor.
¿Lo has hecho ya? ¿Te gustaría saber con certeza que si mueres hoy, irías al cielo? Lo puedes saber, Si te acercas a Dios puedes aprender más acerca de cómo ser perdonado y cómo tener una relación con Jesucristo.
Jesús caminó entre nosotros por un corto tiempo en esta tierra. Pero se puede caminar con él para siempre. La decisión es tuya.
Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez
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He oído la historia de un niño; que una noche durante una gran tormenta tenía miedo. Aterrorizado, dio gritos desde su habitación, "Papá, estoy asustado!"
Su padre no quería levantarse de la cama, lo llamó de nuevo, y su padre respondió, "No te preocupes, hijo. Dios te ama y te cuidará".
Hubo un momento de silencio. El niño dice, "Sé que Dios me ama, pero ahora mismo, necesito a alguien que tenga piel."
A veces, nuestro gran Dios parece increíble, y casi intocable. Ahí es donde Jesús viene, fue Dios con piel, caminando entre nosotros y nos mostró lo que es ser como Dios. Creo que C.S Lewis lo dice muy bien así: "El Hijo de Dios se convirtió en un hombre para que los hombres pudieran ser hijos de Dios".
El hijo de Dios se hizo hombre para que puedas convertirte en hijo de Dios. Tu no haz nacido como hijo de Dios. La Biblia dice que es necesario nacer de nuevo (véase Juan 3:3). Tiene que venir un momento en tu vida en el cual te arrepientas de tus pecados e invitar a Jesucristo a entrar en tu vida para ser tu Salvador y Señor.
¿Lo has hecho ya? ¿Te gustaría saber con certeza que si mueres hoy, irías al cielo? Lo puedes saber, Si te acercas a Dios puedes aprender más acerca de cómo ser perdonado y cómo tener una relación con Jesucristo.
Jesús caminó entre nosotros por un corto tiempo en esta tierra. Pero se puede caminar con él para siempre. La decisión es tuya.
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jueves, 14 de enero de 2010
Dionny Baez Palabra Del Dia - Dia 15
¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero uno solo se lleva el premio? Corred de tal manera que lo obtengáis.
1 Corintios 9:24
El nacer y crecer en el evangelio no es un pensamiento triste, porque desde el día que le di mi vida a Jesucristo, ha sido una aventura. No me arrepiento de un solo día de mi vida que he pasado siguiendo y sirviendo al Señor.
Claro, mi vida ha tenido algunas sorpresas. Una de ellas ha sido ver a la gente que nunca pensé que llegara a la vida cristiana, llegar, y ver a la gente que nunca pensé que caerían, caer. Algunas personas tienen un fuerte inicio y luego chocan y se derrumban. Otros tienen un comienzo más bien débil, pero de alguna manera se arreglan al final. Pero lo mejor de todo es que hay algunos que comienzan y terminan la carrera con creces. Quiero ser una de esas personas. ¿quieres también tu?
Esto es lo que tenemos que recordar; tenemos todo que ver en cuanto a la forma en que la carrera termina. Permítanme decirlo de otra manera. Si quieres ser un ganador en la carrera de la vida, entonces lo puedes ser. Si quieres ser un perdedor, entonces lo puedes ser. En realidad se reduce a las decisiones que tomas a diario. Como he dicho antes, las personas se apartan del Señor, porque, por alguna razón o otra, ellos lo desean. Rechazan ciertas cosas, y al mismo tiempo, permiten que otras cosas entren en sus vidas.
A medida que tomamos nuestras decisiones, nuestras decisiones nos hacen. ¿Qué medidas prácticas se puede tomar hoy para asegurar que usted va a correr bien en la carrera cristiana de aquí a 25 años a partir de ahora? Piénsalo.
Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez-
Si te bendijo, bendicenos con tu comentarios
1 Corintios 9:24
El nacer y crecer en el evangelio no es un pensamiento triste, porque desde el día que le di mi vida a Jesucristo, ha sido una aventura. No me arrepiento de un solo día de mi vida que he pasado siguiendo y sirviendo al Señor.
Claro, mi vida ha tenido algunas sorpresas. Una de ellas ha sido ver a la gente que nunca pensé que llegara a la vida cristiana, llegar, y ver a la gente que nunca pensé que caerían, caer. Algunas personas tienen un fuerte inicio y luego chocan y se derrumban. Otros tienen un comienzo más bien débil, pero de alguna manera se arreglan al final. Pero lo mejor de todo es que hay algunos que comienzan y terminan la carrera con creces. Quiero ser una de esas personas. ¿quieres también tu?
Esto es lo que tenemos que recordar; tenemos todo que ver en cuanto a la forma en que la carrera termina. Permítanme decirlo de otra manera. Si quieres ser un ganador en la carrera de la vida, entonces lo puedes ser. Si quieres ser un perdedor, entonces lo puedes ser. En realidad se reduce a las decisiones que tomas a diario. Como he dicho antes, las personas se apartan del Señor, porque, por alguna razón o otra, ellos lo desean. Rechazan ciertas cosas, y al mismo tiempo, permiten que otras cosas entren en sus vidas.
A medida que tomamos nuestras decisiones, nuestras decisiones nos hacen. ¿Qué medidas prácticas se puede tomar hoy para asegurar que usted va a correr bien en la carrera cristiana de aquí a 25 años a partir de ahora? Piénsalo.
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Dionny Baez Palabra Del Dia - Dia 14
Así que, yo de esta manera corro, no como a la ventura; de esta manera peleo, no como quien golpea el aire.
1 Corintios 9:26
En las competencias de carreras del primer siglo, cada corredor se le asignaba un carril en la pista. Siempre se espera que cada uno se mantenga en su carril asignado. De la misma manera, como tu y yo en la carrera de la vida; nuestra competencia no es con otros creyentes. Por el contrario, nuestra competencia es con nuestros enemigos-el mundo, la carne y el diablo. El objetivo no es ganarle a alguien más. El objetivo es ganarle a las impías influencias que nos pueden detener.
Puedes justificar tu lentitud apuntando a otras personas que siguen corriendo detrás de ti. Cierto. Sin embargo, hay probablemente algunas personas delante de ti. No debe ser tu preocupación el quien esté detrás de ti o delante. Debes seguir en la pista y enfocarte en ella. Dios no te a llamado a correr la carrera de otro. Cada uno de nosotros es llamado para finalizar nuestra propia carrera.
Un incidente de la vida de Pedro ilustra esta verdad. Después que Pedro se había restablecido en el Señor, después de su negación, Jesús le dijo: "Sígueme". Entonces el Señor procedió a decirle a Pedro cómo iba ser el fin de su vida. Mientras hablaban, Pedro noto otro discípulo, Juan, que caminaba detrás de ellos. Pedro preguntó: "¿ Y qué de él, Señor?" (Juan 21:21).
Jesús dijo, "Quiero que él permanezca vivo, hasta que regrese, ¿qué es eso para ti? Tu sígueme" (Juan 21 22). Una paráfrasis suelta sería", Pedro, no debe importante. Solo haz lo que te he dicho que hagas."
Te pregunto el día de hoy, estas ofreciendo un esfuerzo poco entusiasta en la carrera de la vida? ¿O estás corriendo tan bien como puedas? No te preocupes de los demás corredores, preocúpate en tu propia eficiencia.
Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez
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1 Corintios 9:26
En las competencias de carreras del primer siglo, cada corredor se le asignaba un carril en la pista. Siempre se espera que cada uno se mantenga en su carril asignado. De la misma manera, como tu y yo en la carrera de la vida; nuestra competencia no es con otros creyentes. Por el contrario, nuestra competencia es con nuestros enemigos-el mundo, la carne y el diablo. El objetivo no es ganarle a alguien más. El objetivo es ganarle a las impías influencias que nos pueden detener.
Puedes justificar tu lentitud apuntando a otras personas que siguen corriendo detrás de ti. Cierto. Sin embargo, hay probablemente algunas personas delante de ti. No debe ser tu preocupación el quien esté detrás de ti o delante. Debes seguir en la pista y enfocarte en ella. Dios no te a llamado a correr la carrera de otro. Cada uno de nosotros es llamado para finalizar nuestra propia carrera.
Un incidente de la vida de Pedro ilustra esta verdad. Después que Pedro se había restablecido en el Señor, después de su negación, Jesús le dijo: "Sígueme". Entonces el Señor procedió a decirle a Pedro cómo iba ser el fin de su vida. Mientras hablaban, Pedro noto otro discípulo, Juan, que caminaba detrás de ellos. Pedro preguntó: "¿ Y qué de él, Señor?" (Juan 21:21).
Jesús dijo, "Quiero que él permanezca vivo, hasta que regrese, ¿qué es eso para ti? Tu sígueme" (Juan 21 22). Una paráfrasis suelta sería", Pedro, no debe importante. Solo haz lo que te he dicho que hagas."
Te pregunto el día de hoy, estas ofreciendo un esfuerzo poco entusiasta en la carrera de la vida? ¿O estás corriendo tan bien como puedas? No te preocupes de los demás corredores, preocúpate en tu propia eficiencia.
Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez
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Dionny Baez Palabra Del Dia - Dia 13
Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumadór de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios
Hebreos 12:1
Cuando estaba en la escuela secundaria me gustaba correr en la pista de la escuela. Yo era un corredor bastante bueno en distancias cortas, pero me iba horrible en carreras de larga distancia. Odiaba practicar. Pero si veía mucha gente en la tribunas, recibía nueva motivación para correr.
Mientras se corre esta carrera de la vida, tenemos una mejor motivación que la que tuve en la escuela secundaria. Corremos por una audiencia de uno: Jesucristo. Él nos está mirando. Esta orando por nosotros. De hecho, la Biblia nos dice que “Él vive para interceder por nosotros” (ver: Hebreos 7:25).
Fue Jesús quien animó al joven Esteban, cuando se paró frente a los acusadores que estaban dispuestos a ponerle a muerte. Lleno del Espíritu Santo, recibió una visión de Jesús en el cielo y dijo: "Mira, veo los cielos abiertos y al Hijo del Hombre de pies en el lugar de honor, en la mano derecha de Dios" (Hechos 7:56). Al ver Esteban a Jesús, le dio motivación de correr la carrera y terminarla.
Ver a Jesús mantuvo a Simón Pedro, también recibió motivos para caminar sobre el agua. Con su vista en el Señor, hizo lo imposible.
Es importante mantener nuestros ojos en Jesús. ¿Por qué? Debido a circunstancias podemos rendirnos y, a veces, nos descarriamos. La gente nos va a fallar y nos van a faltar a la medida de nuestras expectativas. Los sentimientos van y vienen. Pero Jesús siempre estará ahí para animarnos.
Además, Él ha corrido antes. Él es el último ganador. Él nos mostrará cómo ejecutar. Pero hay que seguir mirándolo a él
Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez
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Hebreos 12:1
Cuando estaba en la escuela secundaria me gustaba correr en la pista de la escuela. Yo era un corredor bastante bueno en distancias cortas, pero me iba horrible en carreras de larga distancia. Odiaba practicar. Pero si veía mucha gente en la tribunas, recibía nueva motivación para correr.
Mientras se corre esta carrera de la vida, tenemos una mejor motivación que la que tuve en la escuela secundaria. Corremos por una audiencia de uno: Jesucristo. Él nos está mirando. Esta orando por nosotros. De hecho, la Biblia nos dice que “Él vive para interceder por nosotros” (ver: Hebreos 7:25).
Fue Jesús quien animó al joven Esteban, cuando se paró frente a los acusadores que estaban dispuestos a ponerle a muerte. Lleno del Espíritu Santo, recibió una visión de Jesús en el cielo y dijo: "Mira, veo los cielos abiertos y al Hijo del Hombre de pies en el lugar de honor, en la mano derecha de Dios" (Hechos 7:56). Al ver Esteban a Jesús, le dio motivación de correr la carrera y terminarla.
Ver a Jesús mantuvo a Simón Pedro, también recibió motivos para caminar sobre el agua. Con su vista en el Señor, hizo lo imposible.
Es importante mantener nuestros ojos en Jesús. ¿Por qué? Debido a circunstancias podemos rendirnos y, a veces, nos descarriamos. La gente nos va a fallar y nos van a faltar a la medida de nuestras expectativas. Los sentimientos van y vienen. Pero Jesús siempre estará ahí para animarnos.
Además, Él ha corrido antes. Él es el último ganador. Él nos mostrará cómo ejecutar. Pero hay que seguir mirándolo a él
Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez
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Dionny Baez Palabra Del Dia - Dia 12
Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante.
Hebreos 12:1
He oído hablar de un gran concierto de una violinista, que le fue hecha la pregunta, por el secreto de su gran acto. Ella respondió: "Planificación de abandono. Cualquier cosa que me impida la práctica, o de tocar, debe ser rechazado."
Creo que algunos de nosotros podríamos utilizar algo de abandono previsto en nuestras vidas, porque puede que haya mucha basura al rededor y es posible de que no nos demos cuenta. Si no me crees, a continuación, intenta pasar de una casa a otra. ¿No es increíble la cantidad de basura que hay recolectada? Lo mismo ocurre en nuestras vidas. Nosotros guardamos muchas cosas que no necesitamos y nos retrasan en nuestra carrera. Periódicamente, tenemos que echar por la borda el exceso de peso y dejarlo ir.
Cuando la carrera de la vida es difícil, nos gusta culpar a las circunstancias, o a otras personas, o incluso a veces a Dios. Pero tenemos que recordar que si tropezamos o caemos, es nuestra propia culpa. La Biblia dice que por Jesús “Todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia". (2 Pedro 1:3).
La Biblia también nos manda a dejar al lado el peso del pecado que obstaculiza nuestro progreso. (véase Hebreos 12:1). De esa manera no sólo dejarás de lado el pecado, sino que también vas a dejar de lado el peso, y solo así acelerarás tu propósito.
De hecho, yo sugeriría periódicamente que te hagas esa pregunta acerca de las áreas inciertas de tu vida: ¿Se trata de una ala o un peso? En otras palabras, te hace acelerar velocidad en esta carrera que está ejecutando? O, ¿es un peso, que te hace frenar?
Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez
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Hebreos 12:1
He oído hablar de un gran concierto de una violinista, que le fue hecha la pregunta, por el secreto de su gran acto. Ella respondió: "Planificación de abandono. Cualquier cosa que me impida la práctica, o de tocar, debe ser rechazado."
Creo que algunos de nosotros podríamos utilizar algo de abandono previsto en nuestras vidas, porque puede que haya mucha basura al rededor y es posible de que no nos demos cuenta. Si no me crees, a continuación, intenta pasar de una casa a otra. ¿No es increíble la cantidad de basura que hay recolectada? Lo mismo ocurre en nuestras vidas. Nosotros guardamos muchas cosas que no necesitamos y nos retrasan en nuestra carrera. Periódicamente, tenemos que echar por la borda el exceso de peso y dejarlo ir.
Cuando la carrera de la vida es difícil, nos gusta culpar a las circunstancias, o a otras personas, o incluso a veces a Dios. Pero tenemos que recordar que si tropezamos o caemos, es nuestra propia culpa. La Biblia dice que por Jesús “Todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia". (2 Pedro 1:3).
La Biblia también nos manda a dejar al lado el peso del pecado que obstaculiza nuestro progreso. (véase Hebreos 12:1). De esa manera no sólo dejarás de lado el pecado, sino que también vas a dejar de lado el peso, y solo así acelerarás tu propósito.
De hecho, yo sugeriría periódicamente que te hagas esa pregunta acerca de las áreas inciertas de tu vida: ¿Se trata de una ala o un peso? En otras palabras, te hace acelerar velocidad en esta carrera que está ejecutando? O, ¿es un peso, que te hace frenar?
Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez
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Dionny Baez Palabra Del Dia - Dia 11
Vosotros corríais bien; ¿quién os estorbó para no obedecer a la verdad?
Galatas 5:7
Imagine, por un momento, que estamos compitiendo en una carrera. Cuando el inicio del disparó de la pistola se da, y despegamos, de repente te dejé en mi polvo. Voy muy bien. Digamos que tomará 10 vueltas, y estamos llegando a la última. Y me digo a mi mismo, "Estoy esfumando la competencia. Voy a ir un momentito a comprar una dona". Y me salgo de la pista. Es evidente que te estaba ganando, pero si no hiciere la última vuelta y no cruzo la línea de llegada, entonces he perdido la carrera. No importa que me lleve nueve de las 10 vueltas. Tuve que terminar la carrera que empecé.
De la misma manera, hay gente que empezaron con una gran explosión de energía, mientras van siguiendo al Señor. Tal vez usted fue una de esas personas. Tal vez viniste a Cristo durante los días de las grandes cruzadas. O quizás fue recientemente. Eso es genial. Pero eso fue entonces, y esto es ahora. Cómo corrías hace un año, o incluso hace un mes, ya no es significante, sino, cómo estás corriendo ahora mismo. ¿Vas a mantener el ritmo? ¿Vas a llegar tras la línea de la meta? Puedes hacerlo si quieres.
Habrá veces en que vivir la vida cristiana no será fácil. Tendrás que mantener la Palabra de Dios y Su promesa de que Él completará el trabajo que ha comenzado en tu vida (véase Filipenses 1:6). ¿Vas a hacer el esfuerzo para cruzar la línea de la meta?.
Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez- Dionny Baez
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Galatas 5:7
Imagine, por un momento, que estamos compitiendo en una carrera. Cuando el inicio del disparó de la pistola se da, y despegamos, de repente te dejé en mi polvo. Voy muy bien. Digamos que tomará 10 vueltas, y estamos llegando a la última. Y me digo a mi mismo, "Estoy esfumando la competencia. Voy a ir un momentito a comprar una dona". Y me salgo de la pista. Es evidente que te estaba ganando, pero si no hiciere la última vuelta y no cruzo la línea de llegada, entonces he perdido la carrera. No importa que me lleve nueve de las 10 vueltas. Tuve que terminar la carrera que empecé.
De la misma manera, hay gente que empezaron con una gran explosión de energía, mientras van siguiendo al Señor. Tal vez usted fue una de esas personas. Tal vez viniste a Cristo durante los días de las grandes cruzadas. O quizás fue recientemente. Eso es genial. Pero eso fue entonces, y esto es ahora. Cómo corrías hace un año, o incluso hace un mes, ya no es significante, sino, cómo estás corriendo ahora mismo. ¿Vas a mantener el ritmo? ¿Vas a llegar tras la línea de la meta? Puedes hacerlo si quieres.
Habrá veces en que vivir la vida cristiana no será fácil. Tendrás que mantener la Palabra de Dios y Su promesa de que Él completará el trabajo que ha comenzado en tu vida (véase Filipenses 1:6). ¿Vas a hacer el esfuerzo para cruzar la línea de la meta?.
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